Thursday, September 9, 2010

El Rey Siervo

Siguiendo la misma línea de pensamiento de mi nota anterior. Hace par de minutos le leí Anaiah antes de su siesta (como de costumbre) de la "Biblia de Jesús." Así le llama ella a la "Biblia para niños Historias de Jesús: Cada historia susurra su nombre"



La Historia de hoy era El Rey de todos los reyes (El cuento de los tres sabios de Mateo 2) y este es el último parrafo que leí:

"Pero este niño era una nueva clase de rey. Aunque era Príncipe del cielo, se había hecho pobre. Aunque era Dios poderoso, se había convertido en un nene indefenso. este Rey no había venido para ser jefe. Había venido para ser siervo."
Esto produjo en mí admiración, mi corazón quería reventar en alabanza y adoración por Jesús. Y oré con Anaiah: "Oh Gracias Jesús! Gracias por ser esta clase de Rey. Gracias por ser el siervo de todos. Enseñanos a servirnos los unos a los otros y ser más como tú. Ayúdannos a amar bien." Y pensé tengo que escribir (porque así me ayuda a procesar mejor y no sólo ignorar el pensamiento, sino realmente en oración hacer de esto una realidad en mi vida) y a la vez lo comparto con otros.
En una cultura donde lo que se promueve es todo auto-satisfacción y vivir a expensas de otros. Jesús nos muestra un camino mucho más sublime, es el camino del servicio i.e. el Camino de la Cruz. Él no vino a que le sirvieran sino a servir a otros. Él no nos llamó a ser los mayores, sino a servir a los demás. Sí Él es Rey, pero el es un Rey que sirve a otros. Sí, nosotros vamos a reinar con Él, pero no es como los reinos de este mundo, su Reino no es de este mundo, es tan diferente. Nosotros reinaremos sirviendo. Ahora mismo estamos siendo preparados para reinar y por eso tenemos que desde ya, hacerlo con gozo y agradecimiento y deleite, porque por toda la eternidad lo vamos a hacer. Yo como madre estoy siendo entrenada para reinar mientras limpio los platos, lavo la ropa, cambio los pañales, sirvo la comida, etc. Mi esposo esta siendo entrenado en la medida que el pasa horas dándose al lugar de oración y la palabra y aun traduciendo y enseñando a otros, ayúdandome en los quehaceres de la casa y con las nenas, prefiriéndome a mí antes que sus propios deseos. Mis hijas están aprendiendo al compartir y ayudar y recoger y perdonar. Todos en cada caminar de nuestras vidas tiene muchas oportunidades para aprender a servir y abrazar el Camino de la Cruz, tomaremos nuestra cruz (aunque realmente ahora mismo no es tan doloroso) y lo seguiremos?

"Hoy, Señor pongo mi mirada en Tí. Tú eres el Siervo de Todos. Tú eres mi ejemplo y mi anhelo. Servir no es algo fácil para mí. Ayúdame, dame gracia para vivir digno de tí. Que hoy y siempre escoja servir, escoja morir a mis anhelos y deseos para escoger lo que es mejor: Amor. Mi Espranza está en Ese Día cuando estaré contigo y Serviré a tu lado. Te amo Señor."

Friday, August 13, 2010

Sirviendo con gozo

Hoy desperté con este pensamiento: "Hoy quiero servir con gozo porque en ese DÍA voy a servir y será con gozo porque estaremos con Jesús el hombre más feliz que haya vivido en la tierra. Él es mi inspiración y mi motivación."


Mientras más lo pienso más me doy cuenta de que este pensamiento no fue sólo un pensamiento...fue el Espíritu Santo hablando a mi corazón (Él definitivamente es nuestro Consolador=Ayuda).



En los pasados días he estado sufriendo en mi interior, ya que estoy tan consciente de mi debilidad, mi falta de paciencia y mi tendencia a molestarme hasta por las cosas más inánimadas (sin vida, efímeras, etc.). Melleno de auto-compasión y me siento víctima de todo y todos. Es patético lo sé, pero es con lo que he estado luchando.

Dios me ha bendecido con dos hijas hermosas, llenas de vida, que están mirando cada paso, cada gesto, escuchando cada palabra y cada tono, sintiendo cada abrazo y cada rechazo...ellas son un libro con muchas páginas en blanco esperando que se escriba en ellas memorias que durarán toda la vida. Yo no quiero
escribir en ellas quejas, enojo, impaciencia, deshonra, falta de perdón. Yo quiero que ellas vean a Cristo en mí. Ese es mi deseo y esa es mi oración. "Más de Ti, menos de mí Señor." En mi no hay nada bueno aparte de Él.

Por eso hoy le pido gracia, gracia para amar bien a mi esposo e hijas y a los demás que me rodean. Gracia para servir en todo con gozo como Él sirvió, sirve y servirá cuando regrese a establecer Su Reino de justicia en la tierra. Mi gozo es que un día lo voy a ver y todo lo que estoy haciendo va a contar. Él ve el vaso de agua que sirvo, Él ve los pañales que cambio, Él ve las noches que no duermo atendiendo a mis hijas porque tienen fiebre o catarro. Él ve y Él no lo olvida, Él escribe todo en Su libro. Él ve las lagrimas que aún ahora mismo derramo en mi quebranto y Él dice que las guarda en su botella (Salmo 56:8).


Mi gozo no puede estar determinado por mis circumstancias sino que tiene que estar anclado con mi esperanza en que Él va a regresar y un Día TODO va a estar bien por que vamos a estar con Él.

"Padre dame gracia hoy para servir con gozo, para poner mi mirada en Ti y ser libre del egoísmo, enojo y otras cosas. Me arrepiento por mis actitudes, te pido que sanes mi corazón y el corazón de los que he herido y que Tú nos restaures con tu amor. En el nombre de Jesús, Amén."